Reportera | Laura Bravo

Metepec.- Respuestas claras no existen a seis meses del escándalo por las erogaciones millonarias en el DIF municipal de Metepec, la aparente displicencia de Gabriela Gamboa -actual alcaldesa con licencia- y el torrente de cuestionamientos entramparon el manejo de las finanzas municipales.

Fue una investigación periodística, a mediados de diciembre pasado, lo que se convirtió en el huracán que escandalizó a Metepec cuando reveló las percepciones millonarias de Mariana Gamboa como presidenta honoraria del DIF municipal.

“Paga alcaldesa de Metepec a su hija un millón de pesos al año por un cargo que debe ser honorífico” así se tituló la publicación original, exhibiendo lo que otros medios retomaron y que la población tachó como un desfalco; por supuesto, un episodio que no se imaginaba la ciudadanía que le había dado un voto de confianza durante la elección pasada.

Al respecto, parece no haber respuestas claras, pero si evasivas, a preguntas directas tan simples y lógicas. Gabriela Gamboa fue cuestionada al término de una conferencia de prensa si en caso de que la votación le favoreciera el próximo 6 de junio, la presidencia honoraria del DIF volvería a tener pago a lo que ella respondió "No lo sé, para empezar, te podría decir que yo no puedo como futurear, lo que yo te podría decir es que estamos con propuestas claras y cuando llegue el momento se definirá.”

Para Gamboa Sánchez, la erogación revelada de la nómina para la presidencia honoraria del DIF municipal de Metepec, está justificada, señalando que en otras administraciones también se cobró en ese puesto.

Tras normalizar dicha conducta, Gabriela Gamboa llamó “acto de transparencia” a los datos puestos al descubierto por una investigación periodística. “Aquí hay un gran tema que yo no sé por qué les causa tanta sensación, nosotros somos transparentes. Somos los únicos que transparencia le estamos dando, pero si tú haces una petición al municipio, están obligados legalmente a decirte estos temas.”, dijo la aspirante a la reelección.

¿Verdad o mentira? Lo que es un hecho, considera la ley, que para aclarar cuentas turbias tendrán que rendirse pruebas al Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México, que tiene como columna vertebral de su finalidad, abatir las prácticas de corrupción.